Este artículo es original, está
escrito por mí y no lo he copiado de ningún sitio. Son mis reflexiones
sobre esta vida surrealista que nos ha tocado vivir.
Tengo que confesar, que hace unos
tres años, cuando empezaron a aparecer estas webs podías encontrar cosas
interesantes. Recuerdo ventas de perfumes al 70%, relojes y ropa y hasta
artículos de alta joyería.
Pero hace tiempo que eso se ha
terminado. Las marcas son siempre las mismas. Deben tener naves industriales
de restos de Calvin Klein Jeans, Kickers, Almatrichi (lo que quiera que
sea), Farrutx o Bourjois. Y qué me decis de las gafas de sol de Tous
, Victorio& Lucchino o Vogue, tienen un excedente de unas dos mil toneladas,
a ver cómo le das salida a eso. Los descuentos tampoco son lo que eran,
ahora te plantan un 30% en una braga de Ralph Lauren del año 3 Antes de
Cristo y se quedan tan panchos (35% de descuento para el pack). Y qué me
decís del tiempo que tienes que esperar para que te lo envíen (debe ser
que tienen los excedentes en Tailandia y los mandan en barco). Le compras
a tu sobrino unos Kickers para 18 meses y cuando llegan los puede
estrenar en la Comunión.
El mayor despropósito lo encuentro
en la degeneración del género, en si mismo. Ropa, calzado, accesorios,
todo de super marcas. Ah sí? Grandes marcas de élite como Mango, Bershka,
Tefal o muchas otras que nunca he oído mencionar en mi vida. Eso
si que es elitismo y exclusividad. Y los juegos de sartenes antiadherentes?
También son complementos? Si, claro, como los muebles de lavabos con sus
grifos y todo, las básculas de baño que te gritan tu peso a viva
voz, los secadores con iones y sin ellos, las pilas alcalinas, la experiencia
Ferrari conduce un Ferrari por los Monegros a mitad de precio, el vino
del Somontano, los chocolates artesanos revenidos, las Mariquita Pérez
y sus vestidos de pueblerina años 50, los DVD´s de animales salvajes en
su propio hábitat cosa nunca vista, los libros de pintura y diccionario
del cuerpo humano, los jamones ibéricos de recebo (con práctico jamonero)
o los edredones y colchas nórdicas de David Delfín, o Angel Schlesser o
Devota & Lomba , que como no venden un solo trapo de moda se dedican
a los trapos de cocina.
Lo dicho, a comprar una de estas
gangas y a esperar a Semana Santa (del año que viene) a que nos llegue.
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