sábado, 3 de marzo de 2012

LOS BADENES: ESE GRAN PELIGRO PARA TU COCHE (Y TU VIDA)

                            ESTE ARTÍCULO ES ORIGINAL, NO LO HE COPIADO DE NINGÚN SITIO. 
                                      SON MIS REFLEXIONES SOBRE UNA VIDA SURREALISTA.

Sí, me refiero a esos pequeños montículos de pocos centímetros de altura que algún listo coloca en determinadas carreteras con el fin de que la gente reduzca la velocidad y no corra tanto. Y lo que logra es el famososo “show de los badenes”. 


Y llega el Todoterreno, inmenso, 4x4, pero no de tracción a las cuatro ruedas, no, de 4 metros de alto x 4 de largo, de esos que tiene una super barra frontal que si se dan contra un muro de hormigón armado Dios le pille confesado (al muro). Que conoces a uno que se lo compró, y todo orgulloso, cuando le preguntas para que coño quiere semejante bicharraco te dice que, bueno, que para el pueblo le viene bien. Para el pueblo. De Ávila, no de la selva boliviana. Y no sabía yo que Ávila tenia una orografía tan accidentada como para necesitar semejante monstruo, pero nunca se sabe. Y va el tio, con ese coche, y llegan los badenes, y frena! Y frena!!! FRENAAAAA!!!Con un coche que puede subir el Kilmanjaro marcha atrás y llegan unos birriosos badenes de 8 centímetros y el tio frena. Y me dan ganas de bajarme de mi coche y darle un guantazo, por tonto del culo.

Y entonces veo al coche familiar. Un coche precioso con 9 puertas y espacio para que 23 pasajeros vayan super cómodos viendo el DVD y jugando al mus en la parte trasera, que los anteúltimos asientos son abatibles y el coche se convierte en un casino. Y también conoces a un tipo que se ha comprado unos como ese, la excusa son los niños. Si no tienes. No importa, que de vez en cuando llevo al sobri. Ah, y para eso este pedazo bicho, y es que solamente la silla para la criatura es tan gigantesca y tan complicada que la ha diseñado la Nasa y parece que puede despegar y todo. Y tu te acuerdas de cuando eras pequeña, en el coche de tu padre, que entrábamos 4 sin problemas o 5 si se daba el caso, y eso sin contar cuando ibamos de Comunión , que la niña mas pequeña siempre iba sentada encima de la abuela de alguien. Bueno, que ese coche, nuevo, precioso y fantástico (el monovolúmen , no el de mi padre de hace 30 años), frena, también en los dichosos badenes, como si no tuviera amortiguadores. Como si por pasar esos horribles y escarpados montículos a 50 por hora el coche se fuera a desintegrar y destartalar, con las puertas saliendo de cuajo y los tapacubos rodando por la calzada cual arbusto en película con música de Morricone. Vaya, si que hacen los coches delicados hoy en día.

 Y entonces llega el chumbeta-chuntero chapucero. Con un coche de hace 30 años (el de mi padre), y tuneado al máximo, con un alerón que parece un parapente, un color azul metálico-fosforito-metalizado que hace daño a la vista, el tubo de escape gordo y negro como la boca del infierno y la tapa del depósito de gasolina en plan Matrix futurista de color aluminio y con remaches metálicos, cosa mas horrorosa. Y el parachoques trasero casi lo arrastra, con una especie de rejilla que le ha puesto de la cual desconozco el uso. Bueno, pues este elemento, que hasta llegar a los badenes se ha saltado dos stops, cuatro cedas, ha hecho mal la rotonda y casi se lleva por delante a una vieja que cruzaba como una incauta un paso de cebra con dos bolsas del Carrefour, este tio, frena, cómo no, y hace una S, una maniobra extraña, para evitar los badenes medio metiéndose por el arcén, que no es tan grande como para que pase entero, entonces unas ruedas las pasa por liso (arcén) y las otras por los badenes. Y todo esto después de que el conductor que va detrás suyo flipe ante tal maniobra de despiste a la par que inservible. 

Después de esto que se puede decir, con nuestras calles y carreteras siempre perfectamente asfaltadas y allanadas, sin bollos, ni baches, ni obras. Mucho cuidado con los badenes, peligro mortal
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario